Ha
sido necesario poner en la calle a 400.000 familias y, la mayor desgracia,
empezar a poner muertos encima de la mesa para que las señorías que se sientan
en los escaños de PP y PSOE dejen de mirar al tendido y se planteen que algo
hay que hacer con los desahucios en este país.
La
voracidad interminable de los bancos y el apoyo a los mismos que han tenido los
dos partidos gobernantes en estas últimas legislaturas ha llevado a este país a
una situación intolerable por más tiempo.
Ahora
se prestan a organizar “grupos de trabajo” para ver “qué se puede hacer con
este problema” que ahora han descubierto de repente. Todo lo que se han
atrevido a insinuar el PP y el PSOE son reformas para los futuros compradores
de viviendas (bajo el sacrosanto principio de la irretroactividad de la ley,
principio que en esta Comunidad se pasaron por… cuando decidieron hacer un
cambio legislativo de la normativa urbanística de Castilla la Mancha, aprobada
por el trámite de urgencia, con apoyo del PP y del PSOE en el año 2005 y
aplicarla el TSJCM con carácter retroactivo al año 2002 para que no pillara el toro al entonces alcalde de
Cuenca).
Estos
dos partidos hacen una vez más un ejercicio de hipocresía y de cinismo
poniéndose ahora ellos la venda de la descomunal herida que sus políticas han
ocasionado a los trabajadores de este país.
Y
mantengo la afirmación de su cinismo e hipocresía porque sistemáticamente se
han negado a apoyar las solicitudes que desde Izquierda Unida se han venido
haciendo en el Parlamento para aprobar proposiciones de Ley y otras iniciativas
para instaurar la Dación en Pago de las viviendas cuyas hipotecas no pueden ser
pagadas al haber quedado sin trabajo sus ocupantes.
FEBRERO DE 2011: , los grupos parlamentarios de PSOE y
PP
confirmaron en el Pleno del Congreso de los Diputados su rechazo votando en
contra de tramitar una proposición de ley de ERC, IU e ICV que reclamaba cambiar la
legislación hipotecaria en el sentido de obligar a las entidades bancarias a
aceptar la dación en pago -que la entrega de la vivienda sea suficiente para cancelar
el préstamo.
JUNIO DE 2011, de nuevo el PP y el PSOE,
en la subcomisión del Congreso de los Diputados creada al efecto para
reformar el sistema hipotecario español, rechazaron la propuesta de una
proposición de ley por parte del BNG
para reformar la legislación en materia hipotecaria que permitiera la dación en
pago. Votaron a favor de la iniciativa del BNG
los partidos IU, ICV y ERC.
Desde el grupo de IU,
ICV-EUiA y CHA se perseguía que las entidades financieras acepten la dación en
pago, es decir, que ante una situación de insolvencia, con entregar la vivienda quede saldada la deuda. Además, la
propuesta tenía otras dos líneas de actuación como que, en el plazo de tres
meses, el Gobierno presente un proyecto
para reformar la legislación hipotecaria, mientras que se añade un
bloque de medidas para los desahucios
en marcha.
Como
se puede comprobar, la sensibilidad de estos partidos ante el drama social que
ellos han creado es nula. Si hubieran tenido alguna, se hubieran evitado
suicidios y, a razón de 500 desahucios diarios, es fácil calcular desde el
principio cuantas familias se habrían ahorrado la desgracia de tener que
abandonar su hogar (al que por cierto, la Constitución Española dice que todos
los ciudadanos tenemos derecho) y quedarse en la calle con niños, ancianos….una
tremenda desgracia.
El
reverso de la tragedia que sufren cientos de miles de familias, millones de
personas, es un incómodo apunte contable en los balances de los bancos, que a
estas alturas no les resulta rentable, pues son activos sin rendimiento. Quizás
sea esta la razón (el problema que ya supone para los bancos la inmensa
acumulación de viviendas) de la actuación última de PP y PSOE negando la
palabra a los desahuciados y escenificando una honda preocupación por el
problema.
Pero
hay una cosa cierta: la presión realizada por las acciones populares, el
trabajo de la Plataforma de Afectados por las Hipotecas y acciones como las de
Stop Desahucios han conseguido sensibilizar a la gente de este drama que afecta
ya a millones de personas. Por tanto la movilización popular es necesaria más
que nunca, porque en este caso también se ha demostrado que es una vía
imprescindible para defender los intereses de las clases más desfavorecidas.
ANA MARIA SANCHEZ DOMINGO
No hay comentarios:
Publicar un comentario