Desde el Área de Sostenibilidad y Medio Ambiente de Izquierda Unida se recuerda, que los ciudadanos de nuestra provincia debemos pagar puntualmente nuestros impuestos, mientras la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha ha insatisfecho cerca de 20 millones de euros a Renfe. Pese a esta deuda, la empresa ferroviaria sigue prestando trenes Madrid-Cuenca-Valencia; si bien, a diferencia del resto de comunidades de España, por carencia de convenio desde 2002, como nuestra región ni define sus servicios, ni compromete al Estado a mejorar los trenes e infraestructura, la dejación de obligaciones del gobierno de José María Barreda está afectado seriamente a nuestra provincia.
En primer lugar, los tiempos de viaje han aumentado artificialmente y no puede accederse a las estaciones de Madrid y Valencia, situadas en el centro de estas ciudades. En segundo término, en el contexto de la liberalización del transporte de mercancías, ADIF ha definido la línea por Albacete como el corredor por el que debe operar Renfe y otras compañías privadas entre Levante y Madrid. Por contrario, aunque es la línea más corta, Cuenca carece de trenes de mercancías. Además, ante la inhibición de la Junta, hay un proyecto de Renfe para reducir drásticamente el número de circulaciones de viajeros vía Cuenca por ferrocarril convencional.
En consecuencia, el Área de Sostenibilidad y Medio Ambiente de IU de Cuenca exige a la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha que, en correspondencia con los impuestos que pagan los ciudadanos, cumpla sus obligaciones y ejerza sus competencias para definir la línea de Cuenca ante el gobierno de España en los siguientes términos: 1) mantenimiento del actual servicio de viajeros, 2) reducción de los tiempos de viaje, 3) uso de trenes tipo TRD, 4) adecuación de la línea para el paso de trenes de mercancías de 600 metros y carga por eje de 22,5 toneladas y 5) intermodalidad ferrocarril-autocares-autobús urbano en el centro de la ciudad.
Estas medidas, que sólo son el cumplimiento de las obligaciones de la Junta con Cuenca, para IU de Cuenca aseguran la sostenibilidad de nuestra provincia. Socialmente, comunican toda la provincia con el resto de Castilla-La Mancha. Económicamente, es el modo más barato de viajar. Y, finalmente, de todos es sabido que el ferrocarril convencional es el modo más eficaz para el medio ambiente.
En primer lugar, los tiempos de viaje han aumentado artificialmente y no puede accederse a las estaciones de Madrid y Valencia, situadas en el centro de estas ciudades. En segundo término, en el contexto de la liberalización del transporte de mercancías, ADIF ha definido la línea por Albacete como el corredor por el que debe operar Renfe y otras compañías privadas entre Levante y Madrid. Por contrario, aunque es la línea más corta, Cuenca carece de trenes de mercancías. Además, ante la inhibición de la Junta, hay un proyecto de Renfe para reducir drásticamente el número de circulaciones de viajeros vía Cuenca por ferrocarril convencional.
En consecuencia, el Área de Sostenibilidad y Medio Ambiente de IU de Cuenca exige a la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha que, en correspondencia con los impuestos que pagan los ciudadanos, cumpla sus obligaciones y ejerza sus competencias para definir la línea de Cuenca ante el gobierno de España en los siguientes términos: 1) mantenimiento del actual servicio de viajeros, 2) reducción de los tiempos de viaje, 3) uso de trenes tipo TRD, 4) adecuación de la línea para el paso de trenes de mercancías de 600 metros y carga por eje de 22,5 toneladas y 5) intermodalidad ferrocarril-autocares-autobús urbano en el centro de la ciudad.
Estas medidas, que sólo son el cumplimiento de las obligaciones de la Junta con Cuenca, para IU de Cuenca aseguran la sostenibilidad de nuestra provincia. Socialmente, comunican toda la provincia con el resto de Castilla-La Mancha. Económicamente, es el modo más barato de viajar. Y, finalmente, de todos es sabido que el ferrocarril convencional es el modo más eficaz para el medio ambiente.
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