miércoles, 11 de mayo de 2011

IZQUIERDA UNIDA EN CAMPAÑA




Según Ana Cruz “el Urbanismo es clave para el desarrollo sostenible”





Cuenca no tiene hasta ahora un modelo de ciudad que potencie sus recursos y se aleje de la especulación inmobiliaria, causante de tanta crisis económica. Gracias a la pésima gestión de los partidos mayoritarios que han estado gobernando el Ayuntamiento durante las últimas décadas.
Dadas nuestras características actuales y para un medio y largo plazo, Cuenca forma parte de las ciudades medias, no somos una Gran Población, por mucho que se empeñen PP y PSOE. Por esta razón ha de estar gobernada de acuerdo al número de habitantes que vivimos hoy y pensando en los que seremos mañana, sin hacer cálculos arbitrarios, previo análisis crítico.
Izquierda Unida entiende que debemos evitar la segregación de barrios incrementando la calidad de vida por igual, desde lo público, controlando y siguiendo las transformaciones urbanas; exigiendo espacios verdes, peatonalizar zonas, uso de la bicicleta, servicios públicos descentralizados, transporte que lleve a la ciudadanía a estos servicios directamente.
El uso que demos a cada parcela del territorio influirá en todas las demás facetas de la vida en común. Es necesario democratizar la ordenación del territorio con las propuestas e iniciativas ciudadanas, siempre dando primacía al interés público y colectivo sobre el individual y privado.
Nuevo Plan de Ordenación Municipal para la convivencia y la comunicación humanas. Hay que superar las prácticas urbanísticas que alejan los servicios entre sí y sin correspondencia alguna con la evolución demográfica. La gestión del suelo público debe evitar cualquier tipo de especulación y potenciar sistemas y equipamientos energéticamente eficientes en la nueva construcción y en la rehabilitación de todo tipo de edificios, viviendas como industriales o de servicios.
Promovemos la vivienda social y la vivienda en alquiler, dentro de un planeamiento urbanístico como función pública al servicio de los derechos de la ciudadanía y no como un instrumento al servicio de la propiedad privada de los suelos. Asegurando la debida protección al suelo no urbanizable en aras a garantizar un medio ambiente natural para el disfrute de todas las personas. Vinculando la obtención de plusvalías urbanísticas al cumplimiento efectivo de los deberes urbanísticos.
Impulsamos las técnicas de participación ciudadana en el ámbito de las decisiones públicas en materia de vivienda. Los destinatarios de las políticas públicas suelen tener buenas ideas en relación a los bienes y servicios que quieren recibir.
Valoramos las necesidades reales teniendo en cuenta la sostenibilidad, solidaridad, ética e igualdad facilitando el acceso a la vivienda a todas las personas, porque es un derecho. Crearemos una Empresa Municipal del Suelo y la Vivienda.

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