Ha finalizado el año
2013, y un año nuevo comienza. No podemos dejar de hacer un balance de lo
sucedido en ese periodo, que a modo de valoración general puede que haya sido
uno de los más aciagos de nuestra historia reciente, y que ha acabado como
empezó: con un negro panorama por delante para la inmensa mayoría de los
españoles. Aunque según el Gobierno ya haya acabado la crisis, vayamos a
asombrar al mundo y el dinero entre a raudales en el país. Es posible que para
ellos y los grandes capitalistas del reino haya sido así, pero para los
trabajadores ha sido insultante, doloroso e injusto.
Desde el ángulo que
elijamos podemos ver la cantidad de medidas que el Gobierno del Sr. Rajoy, al
igual que en Castilla-La Mancha el de Cospedal y –porqué no- desde el
Ayuntamiento de Cuenca, que solo han servido para crear desempleo, privatizar
servicios, degradar la Sanidad, la Enseñanza y la Asistencia Social, desregular
las leyes laborales, precarizar más el trabajo, lanzar al futuro de este país
(que son jóvenes que terminan sus estudios) al otro lado de nuestras fronteras,
pisotear la administración de Justicia, mantener la corrupción intacta, acabar
con la autonomía municipal, recortar los derechos y libertades, intentar acabar
con la libertad de expresión, modificar la Ley del Aborto, que nos lleva más de
30 años atrás….un verdadero aluvión de medidas dirigidas contra los
trabajadores y las capas más vulnerables de la población.
Pero no se puede
olvidar el mecanismo al que se recurre a modo de rodillo por parte de nuestros
dirigentes: la comunicación que nos envían desde el poder, el lenguaje que de
forma monocorde utilizan “a toque de silbato” desde la dirección y que es
utilizada por todos aquellos que salen a los medios; ciertamente produce rubor
contemplar a esa pléyade de altos cargos utilizando los mismos términos, las
mismas comparaciones, los mismos ejemplos ¡qué poca capacidad de expresión
tienen! Su conducta desentierra la política más rancia del mismísimo Goebbels:
“digan mil veces una mentira y se convertirá en una verdad”. De este maestro
han aprendido también a no llamar a las cosas por su nombre: incremento de las
pensiones cuando en la realidad han perdido poder adquisitivo, o Ley de
Seguridad Ciudadana para definir un recorte de la libertad de expresión y de
manifestación de los ciudadanos que consagra la Constitución.
Hemos tenido que
asistir a la “transformación” del Fiscal del caso Noos en abogado defensor del
imputado y la desimputada, o al apartamiento del Juez Silva que investiga el
caso Blesa, y al que se acusa de prevaricación, como se hizo ya con Garzón. Es
interesante consultar la prensa extranjera y su sorpresa ante este tipo de
cosas.
Una Jefatura del
Estado cada vez más desprestigiada: tras las paquidérmicas aventuras y las
entrañables amistades ahora las continúas indisposiciones y pasos por
quirófanos con médicos que son puestos a su servicio desde miles de kilómetros;
las sorprendentes relaciones de Cristina de Borbón con Hacienda, que demuestran
que Hacienda no somos todos, y su pasmoso traslado a Ginebra; los continuos
abucheos recibidos por los miembros de la Casa Real o los datos revelados por
las encuestas sobre la aceptación de la Monarquía han marcado el año también.
El ataque continuado
a la educación pública, saldado con la pérdida de miles de puestos de trabajo en
la enseñanza pública, las multitudinarias manifestaciones contra la Ley Wert y
su aprobación final, al margen de la multimillonaria aportación económica a los
centros privados por parte del Estado.
Se ha generado desde
el Gobierno el mayor deterioro en la Sanidad Pública que se recuerda, el
intento de cierre de las urgencias en nuestra Comunidad, el recorte en los
servicios de ambulancias, cierres de plantas en hospitales, pérdidas de puestos
de trabajo en los servicios…y además hemos tenido que asistir a la noticia de
que el “copago” farmacéutico no ha reducido el coste:
Los
datos oficiales reflejan que el gasto farmacéutico, que es la parte de las
recetas que pagan el Ministerio y las Comunidades, subió en septiembre el 9,75%
respecto al mismo mes de 2.012. Exactamente, y según la web del propio
Ministerio, en septiembre el gasto farmacéutico fue de 744.426.033 euros y un
año antes fue de 678.283.493 euros. Es la primera vez en dos años que sube el
gasto farmacéutico. En estos datos no se incluyen los medicamentos que compran
los hospitales.
Esto se publica justo
al día siguiente de que el Sr. Echaniz, máximo responsable del desastre
sanitario de nuestra región dijera que el copago era una “idea feliz” del
Gobierno, sin sonrojarse.
Asistimos al
beneplácito por parte de nuestros dirigentes de la corrupción generalizada que
les rodea: Guthel, Bárcenas, Caso Burgal, Bankia… y un largo etcétera para
cuyos responsables intuimos que no va a haber castigo. Pero es que no es de
extrañar: si la Sra. Cospedal nos ha dicho que lo que le pagaban a Bárcenas era
en diferido o simulado y no ha tenido que dimitir automáticamente como
responsable nacional de su partido y con Presidenta de la Junta es que muy mal
tienen que andar las cosas por Génova, donde además se rompen y desaparecen
discos duros de los ordenadores que sirven de pruebas en la investigación. Lo
mismo hay que decir de UGT en Andalucía, donde la sombra de la corrupción ha
volado en este año y donde ¡casualidad! también desaparecen archivos.
También ha sido el
año de las sanciones administrativas por todo el Estado para aquellos que se
atreven a salir a las calles y manifestar su oposición a las políticas que
estamos sufriendo: hay miles de personas sancionadas por manifestarse, por
estar en la calle, por decir lo que piensa…y otra que no lo ha hecho y a la que
también se le ha sancionado porque “son personas conocidas”. Un ejemplo: se ha sancionado a ciudadanos de Cuenca por
manifestación ilegal, pero lo curioso es que los condenados, nunca fueron
identificados legalmente por la policía. El fundamento de la
resolución judicial es que estos ciudadanos eran conocidos
públicamente: por tanto se concluye que era innecesaria su identificación.
Bastó con el presunto conocimiento de los agentes para que se produjera
la condena. Nos preguntamos si la presunción de inocencia en nuestro país ¿se
aplica a todos por igual?
La “desindexación” de
las pensiones en relación al IPC para rebajarlas aún más, unido a la reforma
Laboral de este Gobierno han dejado un panorama lamentable para las economías
populares: nuestros mayores, que están cargando injustamente con el
mantenimiento familiar, se ven cada día más imposibilitados para hacer frente a
los gastos. Los parados sin encontrar trabajo, sin ningún tipo de prestación en
muchísimos casos, y el que en mínimas ocasiones encuentran es totalmente
precario e inseguro.
Por más que indiquen
que este año ha bajado el paro en 147.000 personas (en términos
desestacionalizados son 57.600) no quiere decir nada: tenemos que tener en
cuenta la importante bajada de la población activa, el descenso en el número de
cotizantes a la Seguridad Social y un dato importante: 250.000 jóvenes
españoles que se han ido fuera de nuestro país para poder buscarse una salida.
Y tenemos que ver qué tipos de contratos se están haciendo: solo el 6,49% de
los que se hacen son indefinidos. Una degradación del trabajo descarada que
viene a servir las necesidades del sistema capitalista: menores costes, más
inseguridad y amplio ejército de reserva.
Finalmente, también
en nuestra capital tenemos que asistir al deterioro de los servicios públicos
de forma importante, a la privatización del servicio de aguas (aunque lo llamen
como quieran), a la mirada hacia otro lado para enderezar los servicios municipales
y finalmente las medidas extraordinarias de liquidez solicitadas por el
Ayuntamiento de Cuenca en el nuevo Plan de Pago a Proveedores. Esto es una
medida VOLUNTARIA solicitada por el Ayuntamiento (del PSOE) y que supondrán un
endeudamiento de casi 11 millones de euros (que pasan a incrementar la inmensa
deuda municipal), por el que se pagará unos intereses muy importantes y por lo
que se acepta el sometimiento VOLUNTARIO, repito, a las medidas recogidas en la
Ley de Reforma de las Administraciones Locales y que supondrá el colapso y la
bancarrota a medio plazo de la economía del Consistorio conquense. Esto
demuestra también el doble lenguaje del PSOE y como hacen la misma política que
el PP cuando están en el poder.
Un año para olvidar, sin duda.
ANA MARIA SANCHEZ DOMINGO
COORDINADORA PROVINCIAL DE IU-CUENCA
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